La figura
del docente integrador se convierte en
un aspecto muy importante del día a día de los chicos y sus familias.
Después de
tanto trámite, papelito, certificado etc. etc. ¿Tenemos en claro quién es esa persona
que compartirá largas horas al día con
nuestros niños?
En general
se tiende a pensar que el docente integrador es quien brinda asistencia
pedagógica al niño y la institución como parte de un equipo interdisciplinario
que incluye a terapeutas, coordinadores, directivos y familia.
Se ocupa de
revisar los programas, elegir las estrategias adecuadas para el estilo de
aprendizaje, organizar horarios, y si hablamos de nivel secundario, debe saber
interpretar a Borges al tiempo que ejemplifica funciones cuadráticas y balances
contables.
Hasta aquí,
todo de libro…pero la realidad nos demuestra que el docente integrador es mucho
mas…
Se trata de
la persona que puede contribuir de manera fundamental en las posibilidades de sociabilización e
integración. Su intervención es un antes
y un después en la forma que el grupo integre y acompañe al niño
.
El docente
integrador se convierte en un puente entre la persona con necesidades
educativas especiales y su entorno…un gran “intérprete”
Imaginemos
por un momento la siguiente situación… nos recostamos a tomar un merecido
descanso, nos dormimos y cuando volvemos a abrir los ojos ya no estamos en
nuestra cómoda almohada, sino sentados en un duro banco de cemento en medio
de una plaza…el lugar nos parece extraño, los olores y los ruidos también…gente
desconocida pasa y nos mira de forma extraña balbuceando palabras que no
alcanzamos a comprender…buscamos desesperadamente un cartel, algo que nos oriente…y descubrimos la
siguiente inscripción:
“Вы находитесь в на Красной площади в Москве”
Al mismo tiempo y ante la insistente mirada de una Sra. que viste tapado de
lana y gorro de piel nos percatamos que llevamos puesto traje de baño…Algo anda
mal!
El viento que sopla pone en evidencia que la temperatura es bajo cero… y a
esta altura nos tapamos los oídos, corremos buscando un lugar donde
guarecernos, estamos totalmente desorientados y alterados…hasta que…alguien se
acerca y manteniendo una prudente distancia, se agacha y nos habla en un idioma
desconocido. Esta persona se ve amable, entonces tímidamente le explicamos en
nuestro idioma que estamos perdidos, y no sabemos cómo llegamos hasta allí..
El extraño vuelve a sonreír y nos dice:- No se preocupe,
puedo hablar castellano, usted
se encuentra en Moscú, y estoy aquí para ayudarlo…
Y así,
observando esa sonrisa, nos despertamos en
nuestra cama, las mesitas de luz están en su lugar, hace calor, el placard sigue
desordenado…entonces respiramos aliviados al saber que todo fue una pesadilla…
Esta misma sensación
que para nosotros pudo durar cinco minutos, quizás sea el día entero para
nuestros niños que están inmersos en un mundo que no logran comprender y
procesar. Contar con un intérprete que pueda mediar entre sus necesidades y el
entorno que los rodea se convierte en un aspecto fundamental de su día a día.
Por este
motivo, debe ser alguien que crea en las potencialidades de estos niños y se
esfuerce por construir desde lo
adquirido en vez de planificar un programa basado en las dificultades que el niño
presenta.
Mi
experiencia me indica que más allá de su formación, a la hora de pensar en un docente integrador, deberíamos buscar personas que se propongan los siguientes objetivos:
- Fomentar el desarrollo de capacidades, partiendo de lo adquirido y no desde las falencias o carencias actuales del niño.
- Creer en las posibilidades ilimitadas de cada ser humano.
- Ser paciente y perseverante.
- Tener la fuerza necesaria para mediar en los derechos educativos del niño.
- Saber cómo ayudarlo a participar de una actividad recreativa promoviendo su integración fuera de las horas curriculares.
- Contenerlo sin necesidad de exponerlo
- Demostrar empatía y promoverla tanto en el niño como en su entorno.
- Promover la autonomía del niño.
- Interactuar con el niño, no con su síndrome.
- Trabajar en equipo.
Seleccionar
a una persona que mantendrá un vínculo tan directo y prolongado con nuestros
niños merece un tiempo de diálogo abierto y de conocimiento muto, ofreciéndonos
a todos la posibilidad de revisar honesta y abiertamente las pautas de
trabajo y la historia personal del niño en cuestión.
Fer-Una Bitácora sobre autismo
Agradecimientos:
A Nadia T, por su esfuerzo y
persistencia, por creer en las
potencialidades ilimitadas y trabajar para desarrollarlas. Por tener siempre
una sonrisa, celebrar los logros y valorar el esfuerzo. Por ocuparse de la
Pedagogía al igual que de las emociones, por su acompañamiento y por hacer
siempre esa milla extra ya se en horas de clase o en momentos compartidos con
el corazón.
A Silvia
A, por su pasión docente, por creer en el
desarrollo y apostar al futuro, por mostrarnos un camino diferente, por estar,
escucharnos y por ver siempre el vaso medio lleno.
A todos los
docentes, profesores y terapeutas que han sabido
entender las particularidades de mi hijo
y se han propuesto acompañarlo, acercándole herramientas que lo ayudan a demostrar sus potencialidades y
progresar en su vida.
Gracias por
acompañarnos hoy y siempre!